Reunion del IME en la Ciudad de Mexico, 2008

IME: “Inmigración, un mal negocio”

• FABIOLA POMAREDA/Enviada Especial / Ciudad de México |
• 2008-07-31

La Secretaría de Relaciones Exteriores de México reiteró que su demanda principal es proteger a la población más vulnerable: los indocumentados; dio a conocer las ideas que tienen para contrarrestar el ambiente anti mexicano en Estados Unidos y dijo estar interesada en los casos legales en comunidades donde se han violado los derechos humanos de los inmigrantes.

Durante la 59 Jornada informativa del Instituto de los Mexicanos en el Exterior (IME), que se realiza en Ciudad de México, se expusieron este y otros temas relacionados con la diáspora de mexicanos.

El tema de la jornada fue los “Medios de comunicación en español en EE.UU. y Canadá”, por lo que participaron más de 40 periodistas, en su mayoría de radio y televisión.
Carlos González Gutiérrez, director ejecutivo del IME, ofreció cifras como que son 6 millones los mexicanos indocumentados en EE.UU. y que uno de cada dos mexicanos tiene un pariente cercano en dicho país.

El funcionario también citó que un 62% de los mexicanos en EE.UU. no terminaron la preparatoria (high school) y sólo un 5% tiene grado universitario. “Esta vida al margen se traduce en trabajos con bajos salarios y una subrepresentación política”, recordó.

Con respecto a la preocupación por una baja en las remesas, afirmó –como lo han hecho otros funcionarios de gobierno mexicanos- que los flujos de remesas se han estabilizado y que lo que se ha alcanzado es un equilibrio, una “planicie”, lo cual se verá más claro a fines de este año.

En 2007 entraron a México 23,979 millones de dólares por concepto de remesas, informó. “La economía mexicana no vive de las remesas, las remesas representan el 3 por ciento de nuestro Producto Interno Bruto. Más bien la economía mexicana está subsidiando a la estadounidense al proveerle a sus trabajadores más productivos. México paga un altísimo precio por este éxodo de inmigrantes”, dijo, de ahí que tanto él como Carlos Rico Ferrat, subsecretario de relaciones exteriores de México para América del Norte, coincidieran en que la inmigración termina siendo un mal negocio para México.

Según su visión, “dentro de quince años nos vamos a quedar sin mexicanos para exportar y más bien vamos a competir por atraer talento a México”, debido en parte a las políticas de control de la natalidad que se han implementado aquí.

Consultado sobre cómo está preparada la nación frente a quienes ya han decidido regresar, aseguró que “todavía no tenemos cifras duras de que esté habiendo un retorno masivo a nuestro país”.

México tiene programas para reubicar a sus inmigrantes que regresan, los más desarrollados están en Sonora, y funcionan como albergues, detalló; y desde hace cuatro años se tiene el esquema de rapatriación voluntaria al interior del país. Pero reconoció que en lo que es la reincorporación a la economía local del pueblo de origen de donde salió el inmigrante, “eso ya es algo más difícil”.

Por su parte, Rico Ferrat se refirió a la voluntad que tiene la secretaría de relaciones exteriores de trabajar en cuatro áreas. Primero, apoyar respetuosamente las iniciativas que tiene la propia comunidad inmigrante para defender su imagen.

Organizaciones como MALDEF (Mexican American Legal Defense Fund), el Consejo Nacional de La Raza, MATT (Mexican and Americans Thinking Together) y la recientemente formada AMADA (American Mexican Anti Discrimination Alliance) desarrollan ideas al respecto y Ferrat dijo: “no podemos apropiarnos de sus ideas”, pero sí apoyarlas discretamente.

Segundo, transmitir con objetividad hechos como la lucha que realiza México en su lucha contra el crimen organizado. “No en vano han muerto 5,000 miembros de las fuerzas de seguridad mexicanas luchando contra el narcotráfico, para que la droga no llegue a EE.UU., donde está el mercado consumidor; es decir, este es un problema de los dos países”.

Tercero, destacar a los inmigrantes que se han convertido en profesionistas exitosos, por ejemplo, a través de la Red de Talentos del IME. Y cuarto, promover a México como un lugar que ha recibido a 3 millones de estadounidenses, muchos de ellos sin documentos, y que se han quedado en pueblos como San Miguel Allende y otros, algo que pocas veces se menciona.